-¿Y por qué no les pegas?, dice la madre
-Ay, mami, es que son tan lindos
Esta es la historia de dos mariquitas, Eduardo y José. Estaban dando un paseo en su convertible nuevo. De repente comenzó a llover y José le dice a Eduardo: “lalo la lona” y él le contesta: “pepe pepona”…No, pendeja, la lona porque nos estamos mojando
Un marica que va a confesarse le dice al cura: Señor. cura, soy marica.
Cura: pero hijo mío, ¿qué dices?
Marica: pues que soy marica, me gustan los hombres.
Cura: ¿cómo puede ser ?
Marica: pues verá señor cura, en mi casa mi padre, mis hermanos, mis tíos son maricas.
Cura:¿en tu casa no hay a nadie que le gusten las mujeres?
Marica: sí, a mi madre.
Llega un marica a la farmacia de la esquina y le pregunta al dependiente de mostrador:
-Oiga que son aquellas cosas del anaquel de atrás.
-Cuáles, le pregunta el empleado.
-Ay, los del anaquel de atrás precioso, insiste el jotito.
-Ah, son los supositorios, le aclara el dependiente..
Ah que rico. Bueno, véndame aquel rojo, porfis, dice el marica al borde del éxtasis.
-No, mi reina, el extinguidor no está a la venta.
Está un marica en la línea para entrar al cine. De pronto se acerca un caballero le pone la mano en el hombro y le pregunta: ¿aquí esta la cola para el cine?. A lo que el jotón contesta: ¡no, es más abajito muñeco!
No hay comentarios.:
Publicar un comentario